Es ampliamente reconocido que el agua es uno de los principales medios por el que se trasmiten microorganismos causantes de enfermedades y que la desinfección del agua, y más concretamente la cloración, ha sido uno de los más importantes logros en la protección de la salud pública.
En la actualidad se conocen bastante bien los procesos y fenómenos implicados en la desinfección del agua, que en definitiva se dirigen a la destrucción de organismos perjudiciales, es decir, los procesos de desinfección se han empleado con el fin de destruir o inactivar los organismos productores de enfermedades.
La hipótesis más aceptada sobre como destruye el cloro a los microorganismos, se centra en las alteraciones físicas, químicas y bioquímicas sobre la membrana o pared de las células y, por tanto, una vez destruida esta barrera protectora, terminan las funciones vitales de la célula, causando su muerte.
Los procesos de desinfección del agua que pueden emplearse, incluyen alguno de los siguientes tratamientos o una combinación de ellos:
a) Tratamiento físico (por ejemplo por almacenamiento, aplicación de calor u otros agentes físicos).
b) Radiación (radiación ultra violeta).
c) Iones metálicos (por ejemplo cobre y plata).
d) Álcalis y ácidos.
e) Productos químicos tenso activos (por ejemplo los compuestos de amonio cuaternario).
f) Los oxidantes (por ejemplo los halógenos como el cloro, el ozono, el permanganato, etc.)
g) Fotocatálisis heterogénea con TiO2 como fotocatalizador (UV/TiO2).
Son diversos los criterios que se tienen que considerar para valorar el desinfectante más adecuado, entre los que figuran:
1) Aptitud del desinfectante para destruir las diversas clases de organismos, en función de la temperatura y naturaleza del agua.
2) Capacidad del desinfectante para que, en las concentraciones empleadas para conseguir la desinfección, no comuniquen al agua características tóxicas o desagradables estéticamente.
3) Facilidad de aplicación técnica y económica.
4) Capacidad del desinfectante para permanecer en concentraciones residuales tales que eviten cualquier recontaminación, como pudiera ocurrir en la red de distribución.
5) Adaptabilidad de técnicas de valoración prácticas, rápidas y exactas, que nos permitan conocer la concentración del desinfectante residual.
Casi todos los desinfectantes mencionados presentan alguna limitación que excluyen su aceptación en las operaciones de tratamiento en sistemas y abastecimientos públicos, por ahora y en general, el cloro es el producto más ampliamente utilizado en el proceso de desinfección del agua.
Cuadro 2. VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE LOS DISTINTOS PRODUCTOS EMPLEADOS EN LA OXIDACIÓN/DESINFECCIÓN |
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PRODUCTO |
VENTAJAS |
DESVENTAJAS |
CLORO |
– Es el método más utilizado y conocido. – Mejora generalmente la reducción del color, olor y sabor. – Mejora los procesos de coagulación y filtración. |
– Forma subproductos halogenados, tanto con precursores procedentes del agua bruta como en la propia red. – Requiere instalaciones para neutralizar las fugas de gas. – Es menos efectivo a pH alto. |
DIÓXIDO DE CLORO |
– Oxida con facilidad al hierro, manganeso y sulfuros. – Es más efectivo que el cloro y las clo- raminas para inactivación de virus, Cryptosporidium y Giardia. – Elimina bien muchos de los olores y sabores procedentes de algas y com- puestos fenólicos. – Proporciona un residual en el sistema de abastecimiento. |
– Forma subproductos como cloritos y cloratos. – La generación no apropiada, como exceso de cloro, puede formar subproductos halogenados. – Tiene que ser generado in situ. |
Cuadro 2 (cont.). VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE LOS DISTINTOS PRODUCTOS EMPLEADOS EN LA OXIDACIÓN/DESINFECCIÓN |
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PRODUCTO |
VENTAJAS |
DESVENTAJAS |
CLORAMINAS |
– No forman, como hace el cloro, subproductos clorados. |
– No oxidan al hierro, manganeso y sulfuros. – El exceso de amoníaco puede originar en la red problemas de nitrificación. – Tienen que ser, generalmente, generadas in situ. |
OZONO |
– Oxida al hierro, manganeso y sulfuros. |
– Puede producir subproductos, como bromatos, aldehídos y ácidos. – Es muy corrosivo y tóxico. Puede formar óxido nítrico y ácido nítrico que causaran corrosiones en los equipos. – No proporciona residual en la red. – Desaparece con rapidez del agua, especialmente a altos pH y tempe- ratura. – Tiene que ser generado in situ. |
PERMANGANATO POTÁSICO |
– Oxida y elimina a materias orgánicas precursoras de subproductos. – Oxida a sustancias que causan problemas de sabor y olor. – Es fácil de aplicar en cuanto a las instalaciones requeridas. |
– Puede teñir el agua de un ligero color rosado si se dosifica en exceso. – Es tóxico e irritante de la piel. – No es un gran desinfectante. |